LEANDRO DE LA O La diputada local del PRI, Ingrid Rosas Pantojas, celebró el arranque del programa

La también presidente de la Comisión de Asuntos Agropecuarios, Forestal y Pesquero del Congreso Local, recordó que los cacaoteros de la zona de la Chontalpa, también requieren de una reconversión de una superficie cultivada de aromatico del orden de las 40 mil 832 hectáreas de las cuales dependen 31 mil 139 familias.

Por lo que lamentó no haber sido invitada por la Presidencia en su carácter de presidente de dicha instancia legislativa.

Consideró que la reforestación en Tabasco, es muy importante, de hecho, lo manda la Ley Forestal del Estado de Tabasco.

“En esa Ley también se indica que la Comisión Estatal Forestal en coordinación con la CONAFOR deben elaborar y aplicar programas de reforestación y forestación en terrenos forestales degradados, así como llevar a cabo acciones para su protección y mantenimiento. Esas comisiones también están obligadas a promover y realizar campañas permanentes de difusión y eventos especiales orientados a lograr la participación de la sociedad en programas inherentes al desarrollo forestal sustentable”, especificó.

Dijo que por lo tanto, ve bien que se realice ese tipo de programas, porque la reforestación también está relacionado con la preservación y conservación del medio ambiente y tiene que ver con la mitigación de los efectos del cambio climático.

“Mi recomendación sería que en los árboles que se van a sembrar se tome en cuenta el ecosistema de Tabasco, dado que su territorio tiene también amplias zonas pantanosas y lagunares y de tierra firme, por ello nuestro ecosistema está conformado por selva tropical lluviosa; sabana tropical, la selva mediana y baja, la selva de mangles y la vegetación de pantano. Incluso tenemos varia áreas naturales protegidas” citó.

Recordó que la selva tropical lluviosa, que actualmente queda en nuestro territorio, es parte de lo que hasta hace décadas cubría la mayor parte del Estado, pero que debido a que los terrenos que ocupaban se han utilizado para otras actividades como la ganadería, la siembra de cultivos como palma de coco, plátano, cacao, entre otros, ha ido disminuyendo.

“Actualmente, la selvas tropicales, se localizan en algunas zonas de Tenosique, Balancán, Macuspana, Teapa, Tacotalpa, Cárdenas y Huimanguillo, en los diques naturales deltaicos y en la ribera de los ríos. En la selva tropical lluviosa encontramos varios tipos de vegetación: árboles, como caoba, cedro, macayo, palma real, corozo, jobo, macuilís, ceiba, laurel, sauces, pitche, tatúan, framboyanes, árbol de hule, tinto, barí, árbol de pan, cordial y salacias. Respecto a la superficie actual que queda de selvas en el Estado, no tengo un dato exacto de la superficie que nos queda de selva. El último dato que hay y que data de 2011 señala que de selva solo quedan unas 100 mil hectáreas distribuidas en el estado incluyendo los manglares”, concluyó.